Mostrar/ocultar texto completo de la misión La piel de Ibedor emana el aura de Hadum. Puede que la Llama Azur te ayude a revelar más fácilmente su secreto. Después de todo, es la misma llama que protegió esta tierra de la catástrofe de Hadum. Yulaci vigila la Llama Azur de la Cripta de las Reflexiones. ¡Te recomiendo que consigas que te ayude! Bueno, yo creo que me voy a quedar por aquí y luego partiré a correr aventuras. Más adelante ya me centraré en encontrar los tesoros de la Madre que robaron los orzecas. ¡Ah, una cosita! Tienes que fingir que no me conoces si me vuelves a ver. Yo haré lo mismo contigo, ¿vale? Es porque todo el mundo piensa que no soy más que una vagabunda loca, y creo que es mejor así. Eso sí, si alguna vez quieres visitar algún lugar al que no hayas ido nunca, no dudes en pedirme consejo, ¡ji, ji, ji!
Yulaci vigila la Llama Azur de la Cripta de las Reflexiones. Sería genial que consiguieras que te ayudase.
Increíble... ¡Ni siquiera se ha podrido después de todos estos años! Esta piel sombría es famosa por ser la que marcó la destrucción de Orzeca. Alarmados por la llegada de la serpiente sombría a la que ni siquiera Lignaspina pudo detener, los orzecas crearon un nuevo dios a partir del árbol divino de la diosa con el fin de que se opusiera a Hadum, y lo llamaron Kzarka. Mas ese dios creado acabó siendo la causa de su destrucción... Llévale esto a Ranúncula Negra, miembro de la Guardia de Bosquespino, pero ten cuidado. El camino que te aguarda está lleno de peligros. Debes adentrarte en el antiguo Abismo del Olvido, célebre por servir como prisión de Bosquespino. Allí, bajo la Cripta de las Reflexiones, conocerás a las desventuradas del abismo... |