Según los registros de la diosa,
el tercer componente de la Gema del Caos es la Semilla de Tunta.
Tunta es el dios de la tierra al que adoran los turos,
que habitan en el bosque de Tunkuta, nacido de esta semilla.
Se trata de un tupido bosque tan rebosante de vida
que ni siquiera la sierpe de Hadum se atrevió a acercarse.
Además, allí también reposa la Llama Azur, creada por Tunta.
Se dice que la llama se creó como protección mágica
para defender Tunkuta de amenazas foráneas.
Creo que el jefe de los turos tiene la Semilla de Tunta,
pero ahora mismo está intentado mudar el campamento turo
al castillo de Bosquespino para luchar contra Hadum.
Vamos, que está de parte de Sephir, lo cual nos complica las cosas.
Me dijeron que Cirica, la negociadora de las Verti,
lo intentó convencer de que le diera la semilla,
pero tiene la cabeza más dura que sus cuernos.
Aunque por suerte haya turos que no están de acuerdo con las órdenes del jefe,
son duramente castigados por desobedecerles,
así que tienes una ardua tarea por delante.
Lo mejor será que consigas aliento salvaje para ganarte la confianza de los turos díscolos.
Podrás conseguirlo con el arcabuz de las Verti.

Lo mejor será que consigas aliento salvaje para ganarte la confianza de los turos díscolos.

Bueno, ya has hecho la parte fácil de la tarea.
Conseguir la Semilla de Tunta es harina de otro costal.
Tuvimos mucha suerte al adquirir los otros dos componentes,
pero el tercero está en manos de Ulutuka, jefe turo.
Y encima está en la facción de Sephir... No creo que se ponga
muy contenta al verte hablar con Ulutuka.
Nuestra única posibilidad son los turos en desacuerdo con el jefe.
Los castigos de Ulutuka no son famosos por su piedad precisamente,
así que podríamos aprovechar el dolor que ha causado.
La pega es que, al parecer, la naturaleza de los turos es obedecer la
voluntad de su líder,
así que, aunque a pocos les agrada la idea de abandonar su bosque
y muchos han sido castigados por ello,
nada nos asegura que vayan a querer cooperar con nosotros.
En mi opinión, lo mejor será conseguir el favor de Cartil Tankta,
el segundo al mando y uno de los más castigados por Ulutuka.
Al parecer, Cartil Tankta cree que Tunta lo ha elegido para
llevar a cabo su voluntad:
impedir que los turos abandonen Tunkuta.
Ten, aquí tienes el Elixir de Naaxén que he realizado con el aliento salvaje.
Esto curará las heridas de los turos castigados.

Objetivo de misión: Cirica
- Caza un antílope del verdor con el arcabuz y consigue [Aliento salvaje]
- Caza una cierva del verdor con el arcabuz y consigue [Aliento salvaje]
- Caza un hierbaceronte con el arcabuz y consigue [Aliento salvaje]

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Acciones requeridas:

1. Matar monstruos (3):
   
   
   - Antílope del verdor
2. Matar monstruos (3):
   
   
   - Cierva del verdor
3. Matar monstruos (1):
   
   
   - Hierbaceronte